En esta época, en la que solemos agradecer las cosas buenas que nos ocurrieron durante el año, nuestra salud y nuestra actividad cerebral se benefician.. ¿Quieres saber cómo?
De acuerdo al artículo publicado en Psychology Today, “The grateful brain”, la gratitud puede hacerte más saludable y feliz. Lo anterior fue observado en un grupo al que se le pidió escribir en un diario las cosas por las cuales se sentían agradecidos. A diferencia de otros grupos, los cuales escribieron sobre las cosas que les molestaban o por las cuales se sentían superiores a otros, el primer grupo mostró mayor determinación, atención, entusiasmo y energía.
Más específicamente, la gratitud mejora la calidad del sueño, reduce el estrés, mejora los patrones de ejercicio, reduce las molestias físicas y la depresión, mejora la presión sanguínea, la salud cardíaca y aumenta la sensación de bienestar en general.
¿Qué pasa a nivel cerebral? Los Neurotransmisores
La gratitud genera una variedad de efectos benéficos y medibles en varios sistemas del cuerpo, como: Neurotransmisores del estado de ánimo (serotonina, norepinefrina), del sistema inflamatorio e inmunológico (citoquinas), hormonas reproductivas (testosterona), hormonas sociales (oxitocinas), neurotransmisores cognitivos y relacionados al placer (dopamina).
Las personas que mostraron mayor gratitud, tenían los niveles más altos de actividad en la zona del hipotálamo, área del cerebro que regula la alimentación, la bebida, el sueño y el estrés. Mas aún, los sentimientos de gratitud activan las regiones del cerebro asociadas con la dopamina, el neurotransmisor de la recompensa, y cada vez que se genera dopamina, tendemos más a repetir la misma acción (algo parecido a lo que sucede con las adicciones). Así que, al enfocarnos en las cosas positivas y sentir gratitud por ellas, recibimos una recompensa por ello, con lo cual tenderemos más a repetir esta conducta.
El Dr. Murali Doraiswamy, reconocido experto a nivel internacional en cerebro, neurociencia y salud mental, director de Psicología Biológica en el Centro Médico de la Universidad de Duke, entre muchos otros títulos, afirma:
“Si la gratitud fuera un medicamento, sería el producto de mayor venta mundial, con una indicación para el mantenimiento de la salud de cada sistema mayor de órganos".
¿Te sientes agradecido por algo?
¡Escríbelo! ¡Piensa en ello! ¡Habla de ello!
La gratitud hace posible atraer con mayor fluidez eso que deseamos en nuestras vidas pues activa en nosotros una vibración elevada que resuena y manifiesta cosas y situaciones positivas que poseen también una vibración elevada.
Hay tantas cosas por las cuales estar agradecidos cada día. Y seguramente también hay varias personas en tu vida a las que les podrías expresar tu gratitud. El regalo sería doble, pues por un lado, tu cuerpo y tu Ser se beneficiarían a todos los niveles, y por el otro, aquellas personas recibirían un hermoso regalo, más valioso quizás que cualquier objeto material que pudieses regalarles.
¿A quién querrías darle las gracias? ¿De qué manera se te ocurre que le gustaría a esa persona que lo hicieses?
Aprovechemos esta época para reflexionar acerca de cuán agradecidos somos y para anclar esta valiosa actitud y cultivarla poco a poco, cada vez más al servicio de nuestro propio bienestar emocional, físico y espiritual y del de la humanidad.
Laura Camacho,
Coach Transpersonal
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